Puré de espinaca: conoce sus beneficios nutricionales

No es un secreto que incluir frutas y verduras en nuestra alimentación diaria es muy beneficioso para la salud, pues están compuestas de muchísimos nutrientes y aportan energía al cuerpo. Por eso, hoy te contamos, específicamente, todo lo que debes saber sobre las espinacas y te compartiremos una deliciosa receta para que puedas disfrutar de un rico puré de espinacas preparado en casa. La espinaca es considerada un alimento muy saludable porque tiene una composición diversa, que incluye vitaminas, minerales y bioactivos que promueven la salud. Además, también es un alimento antioxidante, por lo que es recomendado consumirlas para la prevención de muchas patologías.

Aportes nutricionales de la espinaca

Las vitaminas A, B1, B2, C y K están presentes en la espinaca, también algunos minerales importantes para el organismo como el hierro, calcio, ácido fólico, zinc y magnesio y, representa una rica fuente de ácidos grasos como el omega 3 y los betacarotenos. Pero, ¿eso qué significa para la salud? ¡Aquí te contamos los principales beneficios de este vegetal!

Aporta energía

Las espinacas son reconocidas por su gran aporte de hierro, incluso más de lo que encontramos en las carnes, por ejemplo, lo que minimiza los riesgos de sufrir enfermedades en la sangre y brinda vitalidad al cuerpo. Si su consumo se combina con alimentos ricos en vitamina C, como frutas cítricas, mejorará la absorción de minerales.

Previene el daño celular

Su acción antioxidante es muy potente, por la cantidad de betacarotenos que contiene, ayudando a preservar las células y su funcionamiento en el organismo, creando además una barrera protectora sobre ellas.

Protege la vista

En las espinacas podemos encontrar luteína y la zeaxantina, un par de compuestos responsables de la coloración de algunos alimentos que, además, ayudan a mantener el pigmento macular del ojo, lo que protege la retina y ayuda a filtrar la luz azul de los dispositivos electrónicos, mejorando la agudeza visual.

Reduce los problemas digestivos

El aporte de fibra que encontramos en las espinacas mejora el tránsito intestinal y hace de la digestión un proceso más eficiente, por eso es recomendable consumirla a quienes sufren de estreñimiento.

Mantiene la función cerebral y del corazón

Los flavonoides, carotenos y el potasio que se encuentra en las espinacas contribuyen al buen estado neurológico. Adicionalmente, su consumo estimula la producción de óxido nítrico que tiene un efecto positivo en el flujo sanguíneo, protegiendo la salud del corazón.

Beneficia la piel, cabello y huesos

La vitamina A, magnesio y vitamina K de las espinacas, ayuda a la formación y mantenimiento de dientes, tejidos óseos, cabello y piel sanos, activando también su capacidad regenerativa y fortalecimiento.

Aumenta las defensas

Todas las propiedades ya mencionadas de las espinacas permiten que las funciones de los órganos mejoren y fortalecen el sistema inmunitario.

Receta de puré de espinaca

El mundo de la cocina es muy versátil, así que podrás hacer combinaciones infinitas y lograr sabores deliciosos. Hoy, te compartiremos una receta de puré de espinaca fácil y rápida, así podrás disfrutar de este delicioso plato y será el punto de partida para continuar explorando nuevas combinaciones.

Ingredientes para el puré de espinaca

• Mantequilla al gusto
• Espinacas lavadas y picadas
• 1/2 cucharadita nuez moscada molida
• Azúcar al gusto
• 2 cucharadas Harina de trigo
• Crema de leche

Instrucciones de preparación: puré de espinaca

1. Cocinar: Con un sartén en el fuego, que deberá estar caliente previamente, poner a fundir la mitad de la mantequilla, reservar la restante y agregar las espinacas a la preparación, tapar y mantener durante 5 minutos en fuego bajo, pasado ese tiempo, retirarlo del fuego.
2. Agregar: Ahora podrás agregar la nuez moscada, el azúcar y la harina. Déjalo en el fuego por un par de minutos más e incorpora crema de leche, poco a poco. Cocinarás por aproximadamente 15 minutos más. 
3. Añadir Antes de servir las espinacas añade el resto de la mantequilla, mueve y ya podrás emplatar. No olvides agregar algunas hierbas finas de tu gusto para sazonar, como orégano, pimienta, ajo e incluso, agregar queso al final para enriquecer el plato.