El efecto Mozart: Beneficios de poner música durante el embarazo

Los beneficios de la música para embarazadas y el efecto Mozart

El efecto Mozart puede definirse como todo el conjunto de bondades, beneficios y ventajas que trae para las personas el escuchar música clásica compuesta por este autor en especial. Diversos estudios de todo tipo, han puesto en evidencia los efectos que trae para la madre y para el bebé. 

Efecto directo en la madre

Se sabe que las madres transmiten gran cantidad de información a sus bebés: su estado de ánimo, parte de sus gustos, entre otras cosas, por lo que, al escuchar música relajante pueden activarse áreas del cerebro asociadas con la relajación y por ende transmitir esta sensación agradable a su hijo.

Efecto directo en el cerebro humano

Para esto hay que tener muy en cuenta que el cerebro se divide en dos partes: el hemisferio derecho y el hemisferio izquierdo. El primero se encarga de todo lo relacionado con el desarrollo de la percepción, mientras que el segundo está más ligado a la parte del lenguaje.  

El efecto Mozart actúa directamente sobre el hemisferio derecho, ayudando a que el desarrollo de la inteligencia se potencialice de la mejor manera para personas adultas y bebés. Todo esto trae una gama de beneficios como los siguientes: 

• Estimula regiones concretas del cerebro 

• Fortalece el aprendizaje 

• Tiene efecto sobre la memoria 

• Estimula la creatividad. 

Es importante resaltar que el feto cuatro meses antes de nacer reacciona a estímulos como el sonido, la luz y es capaz de reconocer otros que fueron frecuentes durante su etapa de gestación.  

Como dato curioso, los bebés cuyas madres escuchaban música relajante, son más tranquilos en las salas de parto si ésta está presente en el ambiente. 

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Consejos para poner música durante el embarazo

La música para estimular se ha vuelto una herramienta para los padres de gran valor. A continuación, sigue estos consejos fáciles para que aprendas a hacerlo de la manera recomendada: 

Consejos generales

Lo mejor para empezar es utilizar cualquier reproductor que permita a la música llenar el ambiente. El volumen debe ser normal y no se recomienda subirlo puesto que el líquido amniótico es un excelente conductor de sonido y no hace falta. Lo ideal, es que esté entre 50 y 60 decibeles, no solo para el bebé, sino también para oídos adultos.

Momento adecuado para poner música a tu bebé

Se podría iniciar durante el quinto mes de gestación, que es cuando el feto empieza a ser consciente de los sonidos a su alrededor.  

Se recomienda poner música a última hora de la tarde o en la noche, ya que en estos momentos del día el feto reacciona mejor a los estímulos, y se abre un espacio muy propicio para la relajación de éste y de la madre. 

Repertorio recomendado

Diversos estudios se inclinan por música relajante, no obstante, poner otros géneros también puede tener beneficios en potencia. La clásica en sí misma al ser más tranquila, tiene la capacidad de tranquilizar (valga la redundancia) a la madre o al bebé, pero poner algún género, artista o estilo que disfrute la mamá, y que sea diferente a éste, también puede ser beneficioso dada la producción de endorfinas y el sentimiento transmitido al no nato. No se recomiendan sonidos muy estridentes como el heavy metal o el rock pesado. 

Los temas infantiles también son una posibilidad dada la periodicidad y rutina en que se utilizarán una vez el bebé nazca, además, están compuestos por artistas especializados en este campo. 

Debes considerar que no solo por el hecho de seguir el efecto Mozart, tu bebé será un genio, es una herramienta válida de estimulación que puedes tener en cuenta como madre, para apoyar a tu hijo en su proceso de desarrollo cognitivo.  

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